Ley del Teletrabajo: lo que debe saber el contador del futuro

El teletrabajo, una forma que se impuso por su propia obviedad y que se aceleró por una circunstancia sanitaria, dejó de ser una novedad para convertirse en una cuestión de supervivencia económica. Adoptar esta modalidad, ya sea integralmente o de manera híbrida, significa un drástico ahorro en términos de logística e infraestructura. Esto nos permite tener el mismo o un mejor desempeño disminuyendo los costos logísticos de transporte, alimentación y espacio. Sin dudas, un gran impulso para las PyMEs y el estudio del contador del futuro.

En definitiva, el contador del futuro tiene que ser capaz de trabajar desde cualquier lugar. Pero no todo se trata de digitalización y plataformas colaborativas, existe también el marco regulatorio. Por eso, vamos a comentarte algunos de los principales puntos de la Ley del Teletrabajo y después si querés una visión más completa mirá este webinar de la Dra. Natalia G. de Diego donde aborda el tema de forma detallada.

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La Ley del teletrabajo

El día 5 de febrero de 2021 se publicó en el Boletín Oficial la Resolución 54/2021 del Ministerio de Trabajo, que determinó que el régimen legal del contrato de teletrabajo será aplicable a partir del 1 de abril de 2021. Por lo tanto, aquellas empresas que ya estén utilizando esta modalidad contractual, a partir de esta fecha, les será aplicable la Ley 27.555, publicada en el Boletín Oficial el 14 de agosto de 2020 y su respectiva reglamentación.

Concepto legal del teletrabajo

Es una prestación de servicios a distancia, ya sea total o parcial, que puede ser realizada desde el domicilio y fuera del ámbito del empleador, a través de los métodos remotos que tenga a disposición. Es una modalidad contractual especial.

El prestador de servicios remoto utiliza herramientas TIC (Tecnología de Información y Comunicación) que, por lo general, son provistas por el empleador. Por herramientas de teletrabajo entendemos cualquier producto que almacene, recupere, manipule, transmita o reciba información, electrónicamente o de forma digital. Las más comunes son:

●      dispositivos (celulares, notebooks, computadoras);

●      Internet;

●      plataformas colaborativas;

●      SaaS;

●      redes sociales;

●      servicios de email;

●      entre otros.

Características de la ley del teletrabajo

Es importante destacar que cada persona que realice tareas en modalidad de teletrabajo deberá contar con una autorización del Ministerio de Trabajo para tales fines. Pero además de eso, vamos a mencionar los aspectos más interesantes de este nuevo marco regulatorio para el contador del futuro.

Voluntariedad

Para comenzar, hablemos de un punto muy importante de un contrato de teletrabajo que es la voluntariedad y que está compuesta por tres elementos principales:

●       discernimiento (el empleado sabe qué está pactando);

●       intención (el empleado quiere realizar esa modificación en su modalidad de trabajo);

●       libertad (el empleado acepta por libre decisión sin presiones).

Pero eso solo no basta, el empleado debe expresar su conformidad y debe ser exteriorizada. Por eso, la orientación es que en todos los casos se elabore y se firme un contrato.

Reversibilidad

Esta es una novedad de la Ley del Teletrabajo que contempla sin dudas el punto de vista del empleado y que se desprende de la voluntariedad. La Ley de Teletrabajo en su artículo 8 manifiesta claramente que el consentimiento podrá ser revocado en cualquier momento de la relación. El trabajador goza de la potestad de revocar y solicitar la restitución al status quo anterior.

En tal caso, el empleador deberá darle tareas en el local de la empresa o, en su defecto, en un local más cercano al domicilio del empleado.

Obviamente que los dos puntos anteriores se aplican a los teletrabajadores que hayan prestado con anterioridad tareas presenciales. La negativa del empleador le dará derecho al empleado a considerarse en situación de despido sin justa causa.

Derechos y obligaciones

Las personas que trabajen en esta modalidad gozarán de los mismos derechos y obligaciones de los que trabajan en situación presencial. Y su remuneración no podrá ser inferior a la que recibían en la otra modalidad. Los convenios colectivos deben ser acordes a la realidad de cada actividad y prever un modelo híbrido.

Elementos de trabajo

El empleador deberá brindar las herramientas y el soporte necesario para el desempeño de las tareas y asumir los costos que requieran la ejecución de las mismas desde el domicilio del trabajador, así como la compensación en caso de que el funcionario trabaje con herramientas propias.

También se establece una cláusula de indemnidad en la que el empleado se responsabiliza por usar adecuadamente las herramientas y no permitir su uso por terceros.

Compensación

Los empleados que trabajen en esta modalidad tendrán derecho a una compensación en casos de gastos, por ejemplo, de conectividad y energía. Cabe aclarar que sobre este valor no será necesario pagar ningún tipo de impuesto de seguridad social por parte de la empresa y que se pueden deducir del Impuesto a la Renta de los colaboradores.

Derecho a la desconexión digital

Este último punto es el más interesante de la Ley del Teletrabajo. La jornada laboral debe ser pactada con anterioridad y por escrito, en conformidad con los límites legales. Asimismo, las plataformas y software establecidos y registrados deberán desarrollarse según lo establecido en dicha jornada, siendo vedada la conexión fuera de la jornada laboral.

O sea, las tareas deben ser realizadas dentro de la jornada prevista. Fuera de ella y durante los períodos de licencia, el empleador no podrá remitirle comunicación por ningún medio y el trabajador no podrá ser sancionado por hacer uso de este derecho.

La perspectiva para 2021 es que se acelere la reversión del impacto económico de la pandemia, no solo en la cantidad de puestos de trabajo, sino también en la calidad de estos.

Por eso, la mejor opción para el contador del futuro es contar con ONVIO, la solución integral online para ajustarnos a la Ley del Teletrabajo, potenciar la gestión contable, tributaria y laboral, automatizar los procesos de colaboración con los clientes y aumentar la productividad de tu estudio, incluso desde lejos.

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